Miércoles 17 de setiembre
Con una demora de 40’ embarcamos en un ATR-72 con destino Mykonos.
El viaje fue tranquilo, tomamos un jugo de naranja y luego de 45’ estábamos aterrizando.
Con gran alegría nos enteramos que nos estaba esperando una combi enviada por el hotel.
Eramos 3 parejas que íbamos a Platis Gialos, una playa que queda a 4 km de Chora (la ciudad principal de Mykonos).
El hotel se llama Petasos Beach y es muy lindo, los empleados son muy simpáticos con buena onda. http://www.petasos.gr/
Nos registramos y nos instalamos, entre una cosa y otra se nos hicieron las 23:30 hs, como teníamos hambre, salimos del hotel y fuimos a la playa, alrededor de la cual hay varios restaurants.
En el hotel nos recomendaron uno llamado Gallop, comimos allí y charlamos con los mozos que hablan algo de castellano.
Yo pedí pasta y Laura costillitas de cerdo. Vino griego blanco, todo por 5.500 apx.
Nos acostamos como a la 1 hs, parece que Mykonos viene bien.
Comiendo al lado nuestro en el restaurant, había una pareja que era de Barcelona, cuyo equipo estaba jugando por la copa de Europa.
Cada gol que le hacían al Barsa era comentado por los mozos que venían y le decían al gallego que vaya adentro al TV para verlo.
Hotel Petasos Beach
Jueves 18 de setiembre
Vamos a desayunar y luego decidimos ir caminando hasta la ciudad de Mykonos (Chora).
La misma queda a 4 km de donde estamos.
El comienzo de la caminata es de terror porque es todo subida, luego el camino baja y se hace mas tranquilo.
Hay viento.
Nos encontramos con un hermoso pueblo, todo de casas blancas y muy limpio.
La población estable es de 5.000 personas y con turistas se hacen 60.000.
Nos perdimos en las laberínticas callecitas, llenas de personajes típicos, turistas caminando, el mar, en fin : es para quedarse un tiempito.
En cada negocio nos paramos a chusmear y en algunos compramos cosas.
Aquí la tarjeta se usa a full.
Decidimos comer livianito y nos metimos en un restaurant llamado Oasis, yo pedí tallarines a la carbonara y Laura rabas (kalimari).
Todo con cerveza porque da menos sueño.
Estaba con la remera de Boca y en eso se acerca un tipo y me dice : “que hacés bostero”.
Era de Quilmes y venía navegando en su barquito con tres amigos.
El barco lo había comprado en Inglaterra, él era médico.
El barco lo había comprado en Inglaterra, él era médico.
Después de comer seguimos recorriendo, subimos hasta un molino desde donde se ve toda la ciudad y el puerto.
A las 16 hs volvimos para el hotel (en bus).
Como todavía el sol estaba alto nos fuimos a la pileta del hotel.
Descansamos un rato y ya bañaditos fuimos a cenar al mismo lugar del día anterior.
Laura pidió ensalada griega (estaba con el estómago hecho bolsa) y yo pollo con ensalada (no estaba mucho mejor que ella).
Eso si, con vino del bueno.
Nos pusimos a charlar con uno de los mozos y al rato se nos apareció con dos tremendos vasos de ouzo.
El asunto fue que nos pusimos agarramos una tremenda borrachera, yo subí hasta el hotel en cuatro patas.
No recuerdo ningún acontecimiento posterior de aquel día.
Viernes 19 de setiembre
Desayunamos tempranito y fuimos de nuevo a Mykonos (esta vez en bus).
El bus sale 210 apx.
Fuimos por detrás de la pequeña Venezia y llegamos a la iglesia de Punaparti, sacamos fotos y caminamos por el puerto.
Vimos los pescadores, los pelícanos y de paso compramos algunas cosas.
En el Hard Rock Café compramos una remera para Luli.
Cuando llegó el mediodía volvimos a Platis Gialos.
Almorzamos en un barcito de la playa, yo comí crepes de jamón y queso y Laura sandwich de pollo (estuvimos muy suavecitos).
Fuimos a la pileta y esperamos que sean las 16 hs, hora en que nos pasó a buscar un bus pues contratamos una excursión recorriendo la isla.
Conocimos las distintas playas, fuimos a una iglesia ortodoxa a la cual no se podía entrar con pantalones cortos (yo tenía).
Me puse un buzo tipo pollera junto con el de Laura, todo iba bien hasta que me echaron porque filmé al rabino.
Vimos el lugar donde se filmó “Yo amo a Shirley Valentine”.
También vimos la casa de Cher (que fashion).
Volvimos a las 19 hs, nos duchamos y fuimos a comer a un restaurant italiano sobre la playa.
Yo comí escalopes y Laura pastas con crema y jamón.
El vino blanco estaba riquísimo.
Volvimos al hotel y en el restaurante del mismo se estaba desarrollando un show de música griega con barbacue.
Nos sentamos en la barra a ver el show y empezamos a tomar ouzo.
Cuando terminaba una canción, los bailarines (tres hombres pues la danza era Sirtaki), venían a la barra y tomaban con nosotros.
Uno de ellos, el más viejo, nos hacía pruebas con servilletas, tenedores e intercambiamos algunas palabras (ni idea).
La cuestión es que nos volvimos a emborrachar con ouzo, y este fue peor.
Nos acostamos y nos desmayamos.
Sábado 20 de setiembre
Hoy es el último día en Mykonos, desayunamos (los desayunos son un capítulo aparte, el mozo es fanático de Haris Alexiou, una griega que canta fabuloso, es así que pone el compact de ella y canta en voz alta todas sus canciones, es realmente contagioso y ya estoy entusiasmado para comprar el disco).
Fuimos de nuevo a Mykonos, caminamos hasta el puerto y subimos al barco que nos llevará hasta la isla de Delos.
Contratamos el viaje con una guía en español (7.000 cada uno).
Delos es la isla que fue el centro cultural y religioso de la antigua Grecia.
Tiene los tesoros arqueológicos mas importantes y su historia es muy interesante, allí dice la mitología que nació Apolo.
Recorrimos todo con las explicaciones de la guía junto con un grupo de gallegos ya que ella era española.
A las 12 :30 hs volvimos (el barco se movía bastante), el viaje dura 30’.
Almorzamos en el puerto unos sandwichs con cerveza.
Volvimos al hotel y nos pasamos la tarde en la pileta.
Me di un toque en el yacuzzi, el cual está al borde de la pileta, al aire libre y viendo el mar. Placer total.
Nos fuimos a preparar las valijas y nos fuimos nuevamente a Mykonos a cenar.
Paseamos un rato, vimos la puesta del sol y luego comimos junto al mar.
Laura quería pescado sin espinas y estuvimos un largo rato tratando de decir espina en griego.
Al final: milagro! le trajeron pescado y no tenía espinas.
Nos acostamos re-cansados y como mañana hay que viajar, no tomamos ouzo.
Domingo 20 de setiembre
Nos levantamos y luego de desayunar bajamos con las valijas.
Nos vamos para el aeropuerto en la traffic del hotel.
Otra vez en un ATR-72, embarcamos para Santorini.
Muy buen relato, sobre todo lo de la pelicula de Shirley Valentine. Espero ver Mikonos pronto
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